Gircol se dedica a recoger el aceite de cocina usado en el Meta. La empresa fue creada por una joven de Villavicencio.
Algunas de las personas que han decido reciclar el aceite usado. Fotos: Archivo particular |
Si se arroja al sifón, el aceite de cocina usado causa
un impacto muy negativo al medio ambiente. Un litro de este puede contaminar
hasta 1.000 litros de agua. Su toxicidad aumenta cuando se mezcla con otros
residuos y finalmente va a dar a los ríos.
Eso lo tiene claro Jessica Lizeth Beltrán Montilla, una
joven emprendedora, de 27 años, que creó en Villavicencio su propia empresa
para recolectar en la región este tipo de residuo. El personal de Gircol, como
se llama la compañía, visita hogares y restaurantes de la capital del Meta, y
municipios aledaños como Acacías, Restrepo y Cumaral.
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“En la ciudad no existía formalmente una empresa que
realizara la recolección del residuo. En el 2018, tomé la decisión de iniciar
con una, brindándoles empleo a personas jóvenes”, comenta la abogada egresada
de la Universidad Cooperativa de Colombia.
Recordemos que hace dos años el Ministerio de Ambiente también estableció el procedimiento para reciclar correctamente el aceite de cocina usado.
Emprender no solo es crear empresa, es tomar decisiones. Para mí el emprendimiento es algo muy bonito
La joven abogada dice sentir pasión por el Derecho y el emprendimiento. |
En charla con Gente Pa’lante, Beltrán recomienda a los
habitantes de la ciudad no botar el aceite y, por el contrario, envasarlo en recipientes
plásticos cuando este frío. La empresa recoge, sin ningún costo, mínimo un
litro del producto. Por cada 20 litros reciclados, a la persona se le entrega
en pequeño incentivo económico.
Al
aceite de cocina que queda luego de fritar huevos, plátanos o carne, entre
otros alimentos, tiene que dársele un manejo especial. No debe ir a la basura.
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Antes de la pandemia, Gircol almacenaba cada mes unas
ocho toneladas de aceite, el cual es enviado a una planta en Bogotá para su
adecuado tratamiento. El residuo es usado como materia prima para producir
biodiesel (combustible alternativo de origen natural).
“En este momento tenemos vinculados casi 250 restaurantes y unas 450 personas nos han entregado a domicilio. Es un porcentaje pequeño para la cantidad de habitantes que tiene Villavicencio. Ahí vamos en ese proceso de poder llegar a todos los rincones de la ciudad”, dice la emprendedora.
Trabajadores de Gircol visitan restaurantes en la ciudad. |
Por la labor que realiza, la empresa fue una de las
diez ganadoras del concurso ‘Un sueño llanero’, que realizó en el 2018 la
Cámara de Comercio de Villavicencio, con la participación de cientos de
emprendedores de la región. Ecopetrol igualmente le ha brindado apoyo a través
de campañas publicitarias.
“Queremos que la comunidad apoye los emprendimientos de
la región. Nosotros estamos inscriptos ante Cormacarena, con todas las
licencias ambientales que se requieren”, agrega.
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Por estos días, Gircol está impulsando en Villavicencio una campaña para que las personas en los conjuntos y las cuadras se reúnan y decidan, entre todos, reciclar el aceite.
La constancia y la disciplina es la que lo puede todo. Hay que enamorarse de lo que uno está haciendo
Jessica Lizeth Beltrán sostiene que en su vida
profesional ha trabajado con empresas de servicios públicos; experiencia que le
ha servido para sacar adelante su proyecto. “Conozco muy bien el tema
relacionado con la prestación del servicio de aseo, que es algo muy similar a
la recolección de aceite”, indica.
¿Qué hace una abogada con este tema que debería ser de
un ingeniero ambiental? Esa es una de las preguntas que más le hace la gente a
la joven. “En realidad para poder constituir una empresa necesitas a un
abogado”, agrega.
La fundadora de Gircol sueña con que su proyecto se convierta a futuro en una empresa de servicios públicos domiciliarios, dedicada a la recolección de residuos aprovechables.
Jessica Beltrán (derecha), visitando un restaurante en Villlavicencio.
El
dato
Lo que también motivó la reglamentación para el reciclaje de aceite de cocina usado en el país fue la existencia de un mercado ilegal que ponía en riesgo la salud de las personas. Las autoridades detectaron mafias que recogían este residuo y lo reenvasaban para comercializarlo a un precio más bajo.
Pasos
para entregar el aceite
1. Deje enfriar el aceite vegetal.
2. Viértalo en un recipiente plástico.
3. Cuando tenga más de un litro del residuo,
comuníquese con la empresa. El número es 313 463 57 42.
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